24.5.05

En el desierto

INT. BAR DE CARRETERA - DIA

Sentados en la barra de un bar a la hora punta del mediodía, RON y KAL dialogan mientras esperan por la comida que han pedido hace un instante.

RON
Imagínate que estás en un desierto y llevas tres días sin comer ni beber.

KAL
Que desierto?

RON
No sé, uno... no es relevante.

KAL
El del Gobi? O quizas el del Sahara?

RON
Imagínate un desierto ficticio con las caracterísicas inherentes de uno real.
Cuál es tu bebida favorita?

KAL
Coca-cola.

RON
Bien. Llevas tres días sin comer ni beber y estás absolutamente aislado sin ningún recurso para entrar en contacto con el mundo civilizado.
Habiéndote sobrepuesto a la desesperación, se te ocurre la brillante idea de reciclar el poco líquido que le queda a tu cuerpo, y que estás desperdiciando a través de la transpiración, lamiendo tu propio sudor.

KAL
Ni hablar, yo nunca haría algo tan absurdo.
(riéndose)

RON
Estoy planteando un supuesto.

KAL
Ni en un supuesto. Ni siquiera en sueños.
(riéndose todavía)

RON
El sol, vale? Las largas horas de exposición continua al durísimo sol del desierto han nublado por completo tu capacidad lógica.

KAL
Puede...
(serio y asintiendo)

RON
Te bebes tu propio sudor entregandote así a una espiral de sed ascendente que te hace cometer, una y otra vez, el mismo error.

KAL
Paradójico.

RON
De repente, del vasto cielo tintado de amarillo, se precipita violentamente ante tus pies un objeto de tamaño aproximado al de un refresco, sumergiéndose en la arena y dejando tras de sí un pequeño cráter que indica su posición.

KAL
Ridículo.Y ahora me dirás que, sin pensarmelo dos veces, introduzco mi mano a través de la arena en el lugar indicado para acabar apresando no otra cosa que una lata de mi bebida favorita: una Coca-cola! Divina providencia.

RON
Excelente. Pero no una lata de Coca-cola normal y corriente...

KAL
A no? Entonces qué?

RON
En la parte trasera de la lata se puede leer la siguiente inscripción: Elije una de las siguientes opciones: 1 Si bebes no serás rescatado. 2 Si eres rescatado no podrás volver a beber Coca-cola. 3 Bebe Pepsi.

KAL
Vaya, el gran dilema de mi existencia.

RON
Yo bebo Pepsi.

KAL
No. En serio? Mi hermana Trina de Manzana. Haríais una buena pareja.
(pensativo por un instante)
La verdad es que me lo has puesto fácil.
(pequeña pausa)
Teniendo en cuenta que lo más probable es que todo esto no sea más que una maquinación publicitaria llevada a cabo por Coca-cola, yo eligiría la primera opción. Con ello no solo conseguiría calmar mi endiablada sed sino también ser rescatado. De no ser así mi muerte correría a cargo de dicha empresa, repercutiendo seriamente en su imagen, y bien es sabido que ese es un riesgo que ninguna compañía con semejante exposición mediática está dispuesta a correr.

Por otra parte esto implicaría la apreciación de la segunda opción que entraría en vigor a partir del preciso instante de mi rescate, opción no elegida por mi en un primer momento pero sí forzada por el transcurso de los acontecimientos. En este caso, aparentemente sin escapatoria y condenado a no volver a beber Coca-cola por el resto de mis días, entraría en acción la lata con la inscripción cumpliendo su función como objeto catalizador de una acción de chantaje. De nuevo, la exposición mediática, actuaría como freno y redireccionador de las intenciones iniciales de la compañía en cuestión.
(Ron se rie a placer)
Y ahora que?

RON
Pareces un puto abogado.
(riéndose de nuevo)
Nada, nada... que no has hecho más que confirmar lo que yo me temía.
(recuperando la compostura)

KAL
Ah si? Y se puede saber que es eso que te rondaba la cabeza?

RON
Que la Coca-cola os vuelve a todos locos. Con lo fácil que hubiera sido elegir la opción 3... y todo por una pequeña diferencia de sabor.

KAL
No nos olvidemos del delicado tema de la concentración gaseosa.
(Ron continua riéndose)

Llega la comida con sus respectivas bebidas, una Pepsi y una Coca-cola.

CAMARERA
Numero 7?

KAL
Aquí por favor.

CAMARERA
Y numero 2.

RON
Gracias.

La camarera, sin preguntar, sirve las bebidas en los vasos equivocados. Ron y Kal se miran, se rien a carcajada limpia y cogiendo cada uno el vaso del otro brindan y comienzan a comer.
La camarera los mira extrañada, se da la vuelta y continúa con su trabajo.

4 comentarios:

Mambotaxi dijo...

Te juro que yo habia escrito un super comentario en esta entrada que ahora no veo....

eurocero dijo...

Tu comentario está en la entrada anterior.

Luis dijo...

No te preocupes, lo he leido. A ver si la próxima afinamos la puntería.

Mambotaxi dijo...

Es lo que tiene estar trabajando todo el dia delante de un ordenador, que uno piere el norte de vez en cuando...